Microsoft Bob fue lanzado en 1995 con la idea de simplificar el uso del ordenador mediante una interfaz amigable y asistida por personajes animados. Sin embargo, su diseño infantil, su alto consumo de recursos y su elevado precio hicieron que los usuarios lo rechazaran por completo. A pesar de contar con el apoyo de Bill Gates y de la propia Melinda Gates, que lideró el proyecto, el software fue un desastre comercial y desapareció en poco tiempo. Hoy es recordado como uno de los mayores fracasos de Microsoft y un ejemplo de cómo no diseñar una interfaz de usuario.
En este vídeo, recordaremos aquella historia de un fracaso estrepitoso, de una idea previa al lanzamiento del mítico Windows 95 que desapareció poco después.