En el año 1981 nació una leyenda de los videojuegos de mano de una recreativa de Nintento donde el protagonista era un mono llamado Donkey Kong.

En el inicio de la década de los años ochenta del siglo pasado, concretamente en 1981, Nintendo presentó su máquina recreativa basada en un juego de plataformas donde el protagonista era un mono gigante llamado Donkey Kong. Otro protagonista era Mario (inicialmente llamado Jumpman), que debía rescatar a una dama que había sido capturada por Donkey Kong.

El diseñador del videojuego fue Shigeru Miyamoto, recibiendo el encargo del presidente de Nintendo Hiroshi Yamauchi. El video juego se inspiró en Popeye y King Kong, y la idea original era que Popeye fuera protagonista, pero una falta de acuerdo con los propietarios de los derechos del comic obligó a cambiar a Popeye por Jumpman primero, y Mario después. Para los escenarios Miyamoto tuvo la ayuda de Gunpei Yokoi, jefe de sistemas de Nintendo.

El éxito del videojuego fue arrollador, sobre todo en Norteamérica y Japón, y posteriormente fue versionado para diversas plataformas domésticas como MSX, Amstrad CPC, o Spectrum. La empresa Coleco se encargó del traslado a las diferentes plataformas. Posiblemente Donkey Kong fue el videojuego que llevó a Nintendo a la senda del éxito fuera de Japón, principalmente en Norteamérica.

El videojuego y el personaje también fueron fruto de diversas disputas legales como, por ejemplo, la demanda de Universal City Studios que consideraba que Nintendo había violado los derechos de autor de King Kong al crear el personaje de Donkey Kong.

El gran éxito del videojuego lo convirtió en producto leyenda del entretenimiento en informática y que, además, incorporaba a los dos personajes más famosos de Nintendo: Donkey Kong y Mario. El personaje de Donkey Kong se mantuvo vivo hasta el año 2015 que hace su última aparición en Mario Party 10.