¿Cómo se decide el nombre de una página web? Es un tema delicado y que requiere cierto conocimiento digital. Y es una elección fundamental que tendrá importancia en el futuro.

El nombre de la página web es algo así como la tarjeta de presentación de un negocio. A nivel de imagen y a lo que marketing se refiere, es un elemento importante porque es lo primero que se asocia a una marca.

Si para nuestra empresa es importante el tema del nombre de la página web, para Google y otros metabuscadores similares lo es aún más. Los motores de búsqueda de Internet tienen en cuenta el nombre de una página web a la hora de posicionarla entre los millones de resultados que arroja una búsqueda. Argumentos de sobra para acudir a profesionales como Edomains y dejarse guiar en esto del alojamiento web.

Detrás de cada nombre de un sitio en Internet, existe una dirección numérica muy larga, que es la 'dirección verdadera' (algo así como la dirección física de tu casa, por así decirlo), pero como sería muy complejo recordar esta secuencia numérica, le ponemos un diminutivo en forma de letras lo más corto posible que nos lleve a ese alojamiento web. Además, un nombre con capacidad de atracción de marca será más fácil de traspasar en caso de ser necesario.

Siendo tan importante esta parte del negocio, no hay que arriesgarse a equivocarse y lo mejor es ponerse en buenas manos y dejar que alguien gestione por nosotros el dominio y el hosting de nuestra página web. Un consejo, cuanto más corto y fácil de recordar sea el nombre, más éxito tendrá. Y además, ten en cuenta hacer un estudio de las palabras clave que llevarán más fácilmente hasta tu página. Todas estas pautas marcarán los resultados que realmente deseamos obtener en cuanto a posicionamiento online se refiere.

Está claro que hay que tener paciencia, del mismo modo que un negocio no arranca de la mañana a la noche, el éxito que genere un alojamiento web también necesita un recorrido hasta llegar a una fidelización con el cliente y convertirse en un referente.

Ahora bien, después de haber dedicado un buen tiempo a pensar en el nombre de tu página, puede resultar que ya esté ocupado. Y los nombres aquí son sumamente exclusivos. Internet no permite que haya dos páginas que se llamen del mismo modo. Por tanto, hay que dejarse aconsejar por profesionales y elegir la opción que más se asemeje y más convenga de entre las que sí están libres o esperar a que lo esté.

Elementos a evitar si quieres que tu página sobreviva

Los caracteres especiales como la ñ o los acentos, guiones, etc. significan desterrar tu página al olvido. Y los números han de usarse con mucha moderación.
Distingue cuál es el ámbito de cobertura de tu negocio para elegir si le corresponde .com, .info, .org o simplemente .es.
Mucho ojo además con elegir en el nombre algo que represente a una marca ya registrada en el mercado, para no entrar en conflictos con ilegalidades.

No te olvides del hosting

El hosting es el espacio en el que se aloja un sitio web y que marca cuánta gente puede llegar hasta él, es como el alojamiento, que no es otra cosa que un servidor web del que usas una parte: espacio en el disco duro, memoria, ancho de banda? Aquí también es necesario ponerse en manos de una empresa que gestione todo el pack según nuestras necesidades.

La inversión vale la pena sólo si está bien hecha. De lo contrario será un agujero de pérdidas. Invertir bien en un servicio de almacenamiento confiable y un dominio es algo elemental para el éxito de nuestra empresa en el ámbito online.