Entre 1937 y 1942 John Vincent Atanasoff y Clifford Edward Berry construyeron una máquina llamada Atanasoff Berry Computer que aportó diversas innovaciones dentro de una informática electrónica que estaba naciendo en aquellos años. El ordenador ABC fue construido en el sótano de la Universidad Estatal de Iowa -en aquellos tiempos conocida como Iowa State College-.
En el año 1939 se realizó la primera demostración pública de un ordenador electrónico, fue presentado el ordenador Atanasoff Berry Computer creado por John Atanasoff y Cliff Berry. Durante casi tres décadas se afirmó que el famoso ordenador ENIAC era el primer computador electrónico de propósito general, después se consideró que ese mérito perteneció al Atanasoff Berry Computer. Pero, finalmente, tal mérito correspondió a la máquina Z1 de Konrad Zuse, que comenzó a operar en el año 1938, un año antes de la máquina ABC, y ocho años antes de la famosa ENIAC.
El ordenador Atanasoff Berry Computer fue descubierto para la historia de la informática gracias a un pleito judicial.
La historia de la relación entre las máquinas Atanasoff Berry Computer y ENIAC es realmente interesante; la segunda una máquina realmente famosa, y la primera fue una máquina desconocida que no fue descubierta por asuntos informáticos, sino que fue descubierta para la historia de la informática gracias a un pleito judicial. Y, a raíz de todo aquello, se descubrió que la máquina ENIAC fue basada en la Atanasoff Berry Computer en muchos aspectos concretos, hecho que pasó totalmente desapercibido durante muchos años.
John William Mauchly y John Presper Eckert fueron los protagonistas principales de la creación del primer ordenador que alcanzó fama mundial, el ENIAC comercializado el 15 de Febrero de 1946. En realidad, el mérito principal se lo llevaron ambos ingenieros, pero mucho tiempo después se supo que el equipó que programó aquel ingenio estuvo formado por un equipo de seis mujeres... hecho silenciado durante muchos años.
Mauchly y Eckert fundaron en 1947 una empresa llamada Eckert&Mauchly Computer Corporation destinada a crear nuevos diseños de ordenadores.
El éxito de la máquina ENIAC fue tal que Mauchly y Eckert fundaron después, el 22 de Diciembre de 1947, una empresa llamada Eckert–Mauchly Computer Corporation destinada a crear nuevos diseños de ordenadores destinados a usos comerciales y militares.
La parte de la historia que se conoció «a posteriori» fue la que afirma que John Atanasoff escribió a John Mauchly, y cinco años antes de la comercialización del ENIAC ambos se conocieron en persona; Atanasoff enseñó su ordenador «casero» a Mauchly ¿Por qué el interés del primero en el segundo? Porque Mauchly trabajaba en el MIT, y Atanasoff estaba interesado en participar dentro del MIT en la creación de un nuevo ordenador. Eso nunca llegó a suceder.
Atanasoff nunca fue invitado a participar en la creación del ENIAC.
En el año 1946 fue comercializado el ordenador ENIAC, de mucho mayor tamaño y de mayor rendimiento que la máquina diseñada por John Atanasoff, y en el desarrollo de aquel gigante nunca fue invitado a participar el creador de la Atanasoff Berry Computer.
La necesidades generadas por la Segunda Guerra Mundial apartaron a Atanasoff y Berry del diseño de ordenadores, y la fantástica máquina creada por ambos terminó en el olvido. Pasaron varias décadas hasta que un litigo judicial descubrió datos desconocidos hasta ese momento.
Hasta el año 1967, veintiún años después del lanzamiento del ENIAC, se consideró a ese ordenador como el primer computador electrónico de propósito general de la historia. Ese año surgió un litigio judicial entre las empresas Honeywell y Sperry Rand Corporation -que era la propietaria de la patente del ENIAC-. La primera se negó a pagar derechos de uso de los circuitos patentados por la segunda, y entonces estalló una batalla judicial que duró varios años.
Durante una batalla legal entre terceros, Atanasoff tuvo acceso a los planos de diseño del ENIAC y descubrió que los circuitos de aquella máquina eran muy similares a los de su máquina.
Durante la batalla judicial Honeywell alegó la existencia de un monopolio, además de considerar la patente inválida, al encontrar la propia empresa Sperry Rand durante la preparación de su defensa referencias a una máquina llamada Atanasoff Berry Computer como el principal origen del diseño. El juez llamó a declarar a John Atanasoff que afirmó no haber participado en el diseño del gigante ENIAC. Pero, al mismo tiempo, durante el juicio el propio Atanasoff tuvo acceso a los planos de diseño del ENIAC y descubrió que los circuitos de aquella máquina eran muy similares a los de su máquina.
El 19 de Octubre de 1973 el juez sentenció que la patente del ENIAC no era válida porque había copiado el diseño de otro ordenador llamado Atanasoff Berry Computer; entonces la máquina creada por Atanasoff y Berry saltó a la fama mundial, y con aquella sentencia judicial se certificó, además, que el ENIAC no fue el primer ordenador electrónico de propósito general de la historia. John Atanasoff, sin tener nada de información al respecto, y sin intención de demandar a nadie, fue el que más beneficio sacó de aquella disputa legal; su ordenador pasó de desconocido y olvidado por la historia a convertirse en un hito electrónico de la humanidad.
La máquina Z1 de Konrad Zuse es considerada como el primer ordenador funcional y programable de la historia.
Muchos años después se empezó a considerar que la máquina Z1 de Konrad Zuse era el primer ordenador funcional y programable de la historia... también había caído en cierto olvido ya que fue destruida tanto la máquina como sus planos en un bombardeo de Berlin en 1943; hasta el año 1989 no fue reconstruida por el propio Konrad Zuse.
El ordenador Atanasoff Berry Computer fue totalmente destruido cuando la Universidad de Iowa reconvirtió el sótano donde se encontraba en laboratorios. En el año 1997, el grupo de investigadores Ames Laboratory que se encontraba dentro de la propia Universidad de Iowa construyó una réplica moderna que demostró a los detractores que el diseño de Atanasoff y Berry realmente funcionaba.
La historia sobre el Atanasoff Berry Computer es realmente curiosa, así como también es curioso el hecho de que haya sido un juez el que concediera, 34 años después de su creación, el verdadero mérito a un ordenador que la historia había olvidado por completo para favorecer al gigante ENIAC que había utilizado en su beneficio las ideas de Atanasoff y Berry.
El ordenador Atanasoff Berry Computer fue descubierto para la historia de la informática gracias a un pleito judicial.