Investrónica fue una marca creada por El Corte Inglés en el año 1980 para cubrir la demanda de una nueva especialidad de la informática: la informática personal.

En 1980 la gran empresa española El Corte Inglés fundó una filial llamada Investrónica, enmarcada en la filial textil Induyco, y dedicada a la distribución de productos de informática. Eran los años de moda de la informática personal; la gran época de expansión de la informática de usuario cuyo gran protagonista fue el pequeño ordenador personal basado en microprocesador de 8 bits.

Al principio, Investrónica buscó distribuir los equipos informáticos de mayor éxito del momento, terminando por ser el importador y distribuidor oficial en España de equipos fabricados por la empresa británica Sinclair... equipos como, por ejemplo, la serie Spectrum de gran éxito en Europa al estar basada en uno de los microprocesadores más rentables de la historia de la informática personal: el Zilog Z80. Pero en el año 1985, y por culpa de un decreto sobre las tarifas arancelarias en España, se comenzaron a gravar las importaciones de ordenadores fabricados en Asia y CEE; aquello forzó a la empresa española a cambiar su estrategia pasando de distribuidor a fabricante... así Investrónica se convirtió en la segunda empresa en España que fabricó ordenadores.

En el año 1985 Investrónica presentó en el SIMO de Madrid el ordenador ZX Spectrum +128, un equipo totalmente fabricado en España en conjunción con Sinclair. Lo curioso de esta historia es que el equipo salió al mercado español antes que fuera lanzado por la empresa propietaria de la serie Spectrum en Reino Unido; el ordenador Spectrum 128+ salió al mercado español de la mano de Investrónica en septiembre de 1985, en cambio Sinclair vio retrasado el lanzamiento al mercado británico hasta febrero de 1986, porque la empresa británica buscó liquidar el stock de equipos antiguos antes de presentar el nuevo modelo.

En 1986 Amstrad compró la empresa Sinclair, y el primer ordenador lanzado bajo el auspicio del nuevo propietario fue el modelo ZX Spectrum 128 +2 que, casualmente, dispuso de una estética muy similar al Amstrad CPC464. Poco antes Investrónica había lanzado un «clon» de Sinclair: el ordenador Inves Spectrum+, que estuvo basado en el original Spectrum ZX de 48 Kilobytes de la empresa británica. Pero la llegada de Amstrad a Sinclair provocó que la nueva empresa propietaria cancelara el acuerdo de distribución para España firmado con Investrónica.

Es importante comentar que el «clon» de Spectrum creado por Investrónica contó con ciertas incompatibilidades con el software desarrollado para los productos oficiales de Sinclair, en principio producidos porque la ROM creada por Investrónica fue traducida de forma inexacta. Aquellas incompatibilidades provocaron cierto desengaño de los usuarios con los equipos creados por la empresa española.

La cancelación del acuerdo de distribución de Sinclair con Investrónica fue el primer paso de Amstrad como nuevo propietario: su distribuidor oficial ya era Indescomp, y así terminó por enfocar, también, la vía judicial, ya que la salida al mercado del «clon» de Spectrum fabricado por Investrónica terminó en demanda judicial por considerar el demandante que existió infracción de «copyright». El 29 de septiembre de 1997 los asuntos legales entre ambas empresas quedaron liquidados cuando el Tribunal Supremo desestimó el recurso de casación de Amstrad, por lo que el tribunal declaró finalmente que Investrónica no infringió el «copyright».

Una vez cancelado el acuerdo de distribución con la antigua Sinclair, Investrónica tuvo que modificar su estrategia. Con la llegada de los ordenadores 100% compatibles con el IBM PC gracias al desarrollo de la técnica de «clonación» aplicada por terceros conocida como «La Habitación Limpia», a Investrónica se le abrió un nuevo mercado donde fabricar «clonando» -como la mayoría de los fabricantes del mundo PC del momento-. Comenzó a fabricar ordenadores Inves PC que tuvieron gran éxito en España, llegando a copar una parte importante del mercado nacional de la informática personal.

En 1986, una vez perdida la distribución de Sinclair por decisión de Amstrad, Investrónica fabricó la primera serie de ordenadores compatibles con PC, construidos y diseñados en España, que fueron los modelos Inves PC 256X, PC 640X, y PC 640A, equipos que incorporaron -a modo de su componente principal- el famoso microprocesador Intel 8088. En el año 1998 Investrónica llegó a un acuerdo con IBM para fabricar el modelo de ordenador IBM Aptiva. Los ordenadores PC vendidos bajo la marca Inves contaron, durante varios años, de gran presencia en domicilios y empresas. Es importante destacar que podría quedar la duda de si el primer equipo PC Compatible español pudo ser el Computec XP de la empresa española Computer Technology de España (CTE), pero no hay datos concretos y certeros que definan con exactitud si aquel ordenador fue lanzado antes que el gama Inves comentada; lo que sí se sabe con seguridad es que el Computec XP no tuvo éxito comercial. También es cierto que una empresa española llamada EINA Informática S.A. ya había lanzado los primeros ordenadores personales basados en el Zilog Z80 en enero 1981, con los modelos EINA Sistema 80 y EINA Sistema 800, y para el año 1983 o 1984 había lanzado su primer PC, el EINA PC; pero ésta segunda etapa dentro del mundo PC de la empresa EINA se había ejecutado llegando a un acuerdo con un fabricante de ordenadores PC Compatible de California... por tanto EINA, aunque sí había fabricado ordenadores españoles basados en el Zilog Z80, no pudo hacer lo mismo con los equipos del mundo PC.

En el año 2004 Induyco vendió la empresa Investrónica al grupo francés Lectra, pero únicamente la parte centrada al corte y confección que se llamaba Investrónica Sistemas. Y aquella operación terminó  en el año 2007 en un arbitraje, además de contar con otros problemas legales en el trayecto de la disputa. La discrepancia tardó varios años en ser cerrada, hecho que sucedió cuando Induyco perdió los sucesivos recursos, teniendo que abonar una cantidad económica a Lectra que rondó los 20 millones de euros con costas judiciales incluidas.

En los noventa hubo otra Investrónica, paralela a la Investrónica Sistemas, independientes una de la otra, que se dedicó, entre otras cosas, a fabricar los ordenadores Inves, e incluso los Aptiva de IBM mencionados en párrafos anteriores. Aquella Investrónica, de logotipo de color verde, tuvo actividad más allá del año 2004 y terminó por ser integrada en IECISA (Informática del Corte Inglés, S. A.). Cesó actividad en el año 2015.