En aquellos primeros años de la informática, el desarrollo de una Aplicación Asesina iba de la mano del diseño de los ordenadores... era un objetivo a buscar, pero difÃcil de lograr. En la serie de televisión Halt and Catch Fire, que relata la informática de los años ochenta, se habla en uno de los capÃtulos finales de la primera temporada de la necesidad de crear una Aplicación Asesina para acompañar al lanzamiento de un ordenador personal que los protagonistas creen que puede ser el futuro de la informática, siempre dentro de la trama de la serie.
Con el nacimiento de Activision, nació la idea de desarrollar software para ordenadores personales de forma independiente al fabricante.
El primer gran cambio dentro de la dualidad Ordenador personal-Software vino de la mano de los empleados de Atari David Crane, Larry Kaplan, Alan Miller, y Bob Whitehead, que abandonaron su puesto de trabajo para crear un distribuidor/desarrollador de software llamado Activision. Con el nacimiento de esa empresa, nació la idea de desarrollar software para ordenadores personales de forma independiente al fabricante. El nuevo modelo de negocio en el desarrollo de software separó, definitivamente, la relación existente entre diseñar un ordenador y crear, por parte del propio fabricante, las aplicaciones para el mismo equipo.
Aunque, inicialmente, la propia Atari se ofendió por la salida de parte de sus trabajadores para crear una empresa externa y vivir del software desarrollado para sus máquinas, en poco tiempo se vio el claro beneficio de centrarse en el diseño de los ordenadores, y conseguir que muchas empresas externas e independientes desarrollen software para el hardware... cuánto más software disponga un ordenador, más fácil será de vender.
En el año 1981 el escenario se complicó aún más cuando IBM decidió crear una arquitectura abierta basada en componentes de terceros, todos ellos gestionados bajo una BIOS propietaria y protegida intelectualmente. Pero aquel movimiento atrajo a otros fabricantes e IBM, accidentalmente y sin intención alguna, creó la compatibilidad entre los ordenadores personales, naciendo asà la arquitectura PC. La independencia del desarrollo del software, sumada a la invasión de la informática compatible basada en arquitectura abierta, terminó por restar importancia a las Aplicaciones Asesinas. No obstante, y dentro del mundo PC, se considera como la primera Aplicación Asesina a la hoja de cálculo Lotus 1-2-3, software que no solo igualó a Visicalc sino que superó notablemente.
Para destacar el gran aspecto gráfico del Apple Macintosh fue necesario desarrollar dos Killer Apps como fueron Aldus Pagemaker y Adobe Photoshop.
Crear una Aplicación Asesina era vital para el éxito de una máquina concreta en el mercado.