En el año 1973 la empresa Shugart Associates comenzó a desarrollar platinas de disco flexible, y aquello se transformó en la base de todos los discos flexibles hasta nuestros dÃas. Poco a poco se fueron introduciendo mejoras como, por ejemplo, la doble cara en los discos de 8 pulgadas presentada en el año 1976. Pero en ese mismo año de 1976 Wang Laboratories encargó a Shugart Associates el desarrollo de un disquete de menor tamaño para equipos de sobremesa... la informática personal estaba naciendo... y entonces nació el disquete de 5,25 pulgadas.
Una vez entrado el nuevo siglo XXI, y con el nacimiento de las unidades flash como, por ejemplo, los famosos pendrive, la unidad de disquete comenzó a morir hasta el punto de desaparecer de la informática cualquier vestigio de los disquetes y su soporte. Y, en la actualidad, el disquete de 3½ pulgadas es un concepto tan olvidado que las nuevas generaciones no reconocen, visualmente, aquellos consumibles hasta el punto de existir en Internet movimientos para sustituir en las aplicaciones de software el famoso icono de guardar, representado por el icono de un disquete, por otro sÃmbolo gráfico que no resulte extraño para aquellos que no hubieran nacido cuando reinó.
David Noble, y en los laboratorios de IBM, propuso un disquete de 8 pulgadas de lectura/escritura de 150 Kilobytes de capacidad en una única cara.